Paco Jones Losmíos

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¿Podés revisar Alienación? Un usuario le hizo un montón de cambios sin referencias apropiadas, algunos pueden estar bien pero otros no y hay que revisar íntegramente la información. Un beso.--Jalu (discusión) 01:14 14 sep 2012 (UTC) Parece que ese usuario tambien hizo lios en Conciencia (psiquiatría)

Hola Mar. ¿Cómo estás? Venía para pedirte lo mismo, pero veo que me han adelantado. Yo solo puedo hacer unos retoques muy superficiales y creo que este tema es de los tuyos. Saludos, --Technopat (discusión) 08:02 14 sep 2012 (UTC)

Respondo mejor aquí, para ambos: Llegáis aquí con esta cara de santitos pero... ¡Vaya lío en el que me queréis meter! . Revisé un poco el tema. Creo que necesitamos una solución mucho más sistémica, que involucraría necesariamente a varios artículos más, al menos todos estos:

• Alienación
• Enajenación mental
• Enfermedad mental
• Locura
• Teoría marxista de la alienación
• Enajenación (Derecho)

Pienso que lo más complicado es la entrada general "alienación". Tiene solo dos futuros posibles, en mi opinión: o ser muy simple, casi de diccionario, con enlaces a estos y a otros artículos (prácticamente algo más que una desambiguación), o ser exhaustivo y extenso, donde, si optamos por eso la tarea es titánica, casi tan imposible como aquella en la que estoy hace ya meses trabajando aquí, sin lograr acabar de traducir (y menos de adaptar y corregir).

Y es que el artículo Alienación tendría que ser tremendamente extenso para abarcar los distintos significados del concepto en filosofía, en sociología, en psico[pato]logía, en psicoanálisis, en derecho y en economía política y además, de pasada, distinguir con todos sus matices los conceptos de enajenación, alienación, objetivación y "cosificación"... uf!!. Lo malo es que hay que optar por una de esas dos alternativas. Porque el principal problema del artículo actual es que, al quedarse a medio camino, ni logra transmitir la idea general (porque es una pegoteado de ya demasiados aspectos parciales) ni tampoco es exhaustivo, cuestión que obviamente perjudica su neutralidad. Por eso, no basta pasarse por ahí y darle una revisión. Uno de estos días podría hacer una propusta de trabajo para estos artículos relacionados. Si partimos por reorganizar qué debe ir dónde, ya tendríamos una mejor estructura en la que podríamos ponernos a trabajar entre todos juntos. Pero lo primero es ponerse de acuerdo sobre el alcance del artículo general alienación, creo yo. Abrazos para ambos Mar del Sur (discusión) 11:49 14 sep 2012 (UTC)

Hola Mar. Gracias por tu nota. Totalmente de acuerdo con tu diagnóstico: abarca actualmente demasiados términos. En cuanto al tratamiento, yo siempre abogo por el principio de la navaja de Ockham (otra cosa es que lo consigo implementar...), así que iba a proponer la página de desambiguación, y en cada artículo correspondiente los enlaces a los artículos principales que pudieran surgir. Pero realmente me da igual cual de las posibles soluciones adoptaís, ya que este usuario con carita de santito no va a participar en su creación :) En todo caso, apareceré por allí de vez an cuando para mantenimiento. Saludos a todos, --Technopat (discusión) 12:29 14 sep 2012 (UTC)

Yo soy de la idea de hacerlo con enlaces a otros artículos, no sintético tipo diccionario pero si sencillo, mostrando a lo largo de la historia las distintas acepciones del término. Si es demasiado largo se vuelve imposible no mezclar conceptos y se podría tornar confuso. Hacerlo sencillo, no tipo diccionario, pero si con enlaces a distintos artículos. --Jalu (discusión) 12:30 14 sep 2012 (UTC)

Alienación es un término genérico que comprende todos los trastornos mentales, así temporales como permanentes.

La palabra alienación tiene múltiples sentidos peyorativos en español. Así, alienar, alienación, alienado, significa estar loco; comprometer un bien, alienándolo; permanecer dentro de sí absorto, arrobado, ensimismado, alelado, impedido; estar fuera de sí, arrebatado, frenético, virulento y también embelesado, obnubilado, idiotizado, programado y hasta como paralizado. De los múltiples sentidos en español, predomina la idea de hacerse diferente en la locura, o ser extraño a uno mismo. Alienación también, en su sentido más comun, se emplea para definir la esclavización mental de un trabajador para su explotación laboral. la esclavización mental, el lavado de cerebro, la pérdida de la personalidad, la identidad o las ideas propias de una persona o de un colectivo debido a la influencia o dominación de otra u otras.

La palabra alienación es una palabra que tiene una pluralidad de sentidos. Como no se puede encontrar un significado único y propio entre esta multiplicidad de acepciones, se recurre a buscar un concepto que la exprese. La expresión se emplea en diversos sentidos que diversas disciplinas han venido desarrollando, en sus respectivos campos. A las acepciones que en medicina y psicología recoge el DRAE, hay que añadir las de otras como la filosofía y la psicología.

Generalidades

El origen de la palabra "alienation" es inglés y significa «marca, distintivo, señal», es decir, que algo exterior tiene existencia. Su primera aplicación tuvo el sentido de cesión o transacción comercial. En otro sentido derivado, "alienation" quiere decir «donación», como pérdida de una parte de sí mismo o de un bien propio. Más tarde, alienation evoluciona y se identifica con la palabra estrangement, expresión de encontrarse desposeído, que agrega una nueva dimensión espiritual al sentido originario.

De la palabra inglesa "alienation" se deriva la palabra en aleman "Entäusserung", para indicar el mismo sentido casi idéntico, pues significa «deshacerse o desposeerse». Esta palabra adopta posteriormente un significado mas amplio y generalizador para expresar el acto de la exteriorización. Pero, como era necesario diferenciar claramente la palabra «exteriorización» de la alienación propiamente dicha, se crea la palabra "Entfremdung" para complementarla, con un significado estricto de «enajenar o enajenación». Se componen estas dos palabras para conjugar la manifestación y exteriorización de sí mismo y, más tarde, expresan también la extrañeza, cómo "hacerse otro" o "extranjerizarse". Asimismo, revelan la situación de explotación de un hombre, desposeído de todo, que vive para otros. En un sentido más total y definitivo, la palabra "Entäusserung" significa «objetivarse», y "Entfremdung" «extrañarse».

Una acepción semejante tiene la palabra española alienación, que suele interpretarse sólo como «enajenación». La palabra alienación es una variante culta de "enajenar" que deriva de ajeno, procedente del latín "alienus" y ésta de "alius" que significa «otro». Etimológicamente es un vocablo que deriva, en el idioma español, del latín ălĭēnātĭo, ōnis: alejamiento, privación, procedente a su vez del adjetivo ălĭēnus: propio de otro, extraño a uno, ajeno. De este origen diverso surgen una multiplicidad de sentidos figurados y, a veces, hasta opuestos. Así, alienación significa estar loco; comprometer un bien, alienándolo; permanecer dentro de sí absorto, arrobado, ensimismado, alelado, impedido; estar fuera de sí, arrebatado, frenético, virulento y también embelesado, patitieso y hasta como papando moscas. De los múltiples sentidos que en español tiene la palabra alienación, predomina la idea peyorativa de desposeido, pirateado, programado, bien sea para dar una cosa que es propia, o hacerse diferente a uno mismo. Alienación significa también «poner en línea recta», sueños, aspiraciones, propósitos, pero, igualmente, tiene un sentido peyorativo.

La idea común a los diversos conceptos de alienación hace referencia a algo "ajeno" a si mismo que el hombre ya no controla, un bien que se vende o un "yo" que se extraña.

Se trata de un fenómeno que anula el libre albedrío del individuo hasta el punto de hacerlo dependiente de lo dictado por otra persona u organización. Es una alteración mental, un proceso mediante el cual un individuo o un grupo transforman su conciencia hasta hacerla contradictoria con lo que debería esperarse de su condición.

El concepto de alienación ha ido cambiando con el tiempo. Para Santo Tomás la alienación es la posesión del cuerpo del hombre por el demonio y la libertad es anterior a su alienación por el demonio posesor. Para la psiquiatría el alienado es un enfermo mental, pero no presupone que sea necesariamente una patología mental. Puede ocurrir tanto en sujetos aparentemente sanos como en personas afectadas por una patología mental. La mayoría de los individuos puede llegar a un estado de alienación mental bajo ciertas condiciones extremas. A diferencia de la psicosis en la cual el individuo sustituye la realidad por un delirio, en el estado de alienación, según los psicoanalistas, el individuo sustituye la realidad por el discurso de otro.

Distintos autores hablan de una alienación subjetiva (locura) y de una alienación objetiva (trabajo).

La zombificación de Haití, está íntimamente relacionada con la esclavitud y la opresión..En 1937 la folclorista estadounidense Zora Neale Hurston conoció en Haití el caso de Felicia Félix-Mentor, fallecida y enterrada en 1907 y a quien, sin embargo, muchos lugareños aseguraban haber visto viva treinta años después convertida en zombi. Hurston se interesó por rumores que afirmaban que los zombis existían realmente aunque no eran muertos vivientes sino personas sometidas a drogas psicoactivas que les privaban de voluntad.

Historia

Hegel

Feuerbach

Marx

Orwell

Alienación mental no debe confundirse con alienación social. Se distingue entre varias acepciones más, al trastorno mental de la esclavitud social. A nivel individual es en algunos casos, una perturbación mental, en la cual se puede presentar una anulación de la personalidad individual y confusión del raciocinio. En grupos va de la mano de la manipulación social, la aniquilación cultural, la dominación política y la opresión de la persona o colectivo alienado. Puede considerarse un entrenamiento, adiestramiento, adaptación, o derivación de un pensamiento o propósito independiente de su naturaleza pero que domina sobre él o ellos y termina por imponerse.

El término de alienación mental trata entre otros, de un estado psicológico que sólo es identificado por un observador externo, en tanto que el sujeto alienado en su pensamiento desconoce totalmente lo que le sucede.

La alienación no presupone una patología mental. Puede ocurrir tanto en sujetos aparentemente sanos como en personas afectadas por este trastorno mental. La mayoría de los individuos mentalmente saludables puede llegar a un estado de alienación mental bajo ciertas condiciones.

El alienado permanece dentro de sí, ensimismado por su desorientación social en un proceso que puede ser inducido por sí mismo. Se trata de un fenómeno no ‘innato’ en la persona sino posterior y de disposición psicológico-mental. Es una forma de adaptación, aceptación, separación o enajenamiento del individuo con la realidad.

El término está relacionado con un tipo de neurosis en referencia a los trastornos sensoriales y motores causados por enfermedades del sistema nervioso. La alienación es un proceso mediante el cual un individuo transforma, es aleccionado o autoalecciona a su consciencia por un proceso morboso inintencionado, durante el cual establece unas creencias, o fija determinadas asociaciones mentales, generalmente con un propósito específico en ocasiones contradictório con lo que cabría esperarse de su condición. Es causado por la imposibilidad de cuestionar las normas que el poder impone sobre él o la imposibilidad de pensar o analizar su situación.

La alienación también sucede a veces porque el sujeto esté inmerso en un sistema bajo un poder social que le impide juzgar libremente acerca de ese sistema o de la posición del individuo con respecto a ese poder y sus referencias identificatorias. La prohibición de pensar libremente se ejerce en el raciocinio humano, que ni siquiera puede reflexionar de sí mismo su conversión a esclavo al servicio del poder. Se trata de un individuo o grupo dominado por otro. El alienado es el resultado de ser empleado como una cosa, no como una persona, por el otro, y no permitirsele el derecho al pensamiento, ni a la palabra.

La alienación varía grandemente en el grado de severidad. Los casos más severos se caracterizan por una completa ausencia de relaciones sociales de por vida, comportamiento extremadamente repetitivo, inusual, auto dañino y agresivo.

La alienación mental sea o no producida por uno mismo, es un desorden del desarrollo del cerebro que deteriora su comunicación e interacción social causando un comportamiento frecuentemente, restringido y repetitivo. Puede clasificarse de diversas formas, como un desorden en el desarrollo neurológico o un desorden en el aparato psíquico. Algunas de sus características son: el comportamiento auto-estimulatorio, "extraños" movimientos, intereses intensos e inusuales, repetitividad de rutinas, apego a ciertos objetos, anulación de la personalidad individual, confusión del raciocinio, excitación psicomotora, incoherencia del pensamiento, perplejidad, síntomas alucinatorios oniroides, locura...

Esta alienación es una forma de lavado de cerebro, hasta la autosugestión. Generalmente se lleva a cabo bombardeando la mente con pensamientos repetitivos, positivos o negativos, hasta que permanecen en el subconsciente. Mediante este autoengaño el alienado se niega a racionalizar relevantes y significantes evidencias y argumentos lógicos que son opuestos a los propios, ya que todo el mundo tiene un bagaje emocional de creencias que pueden ser irracionales. Algunos biólogos evolucionistas sugieren que el engaño es una parte importante del comportamiento humano, el instinto para el auto engaño puede haber dado a los organismos humanos una ventaja selectiva: si alguien se cree su propia mentira, por ejemplo su propia presentación sesgada hacia sus propios intereses, será mejor o más capaz de persuadir a los demás de su verdad.

La racionalización es un procedimiento psíquico de estructura neurótica o un mecanismo de defensa que consiste en justificar las acciones, generalmente las propias, por el que un sujeto persigue otorgar una explicación o justificación "coherente", desde un punto de vista lógico, y aceptable para los otros, de tal manera que eviten la censura desde un enfoque ético de una determinada conducta o actitud, reñida con valoraciones sociales agenas. La creencia de que nuestra acción no es bien vista por el otro o los otros lleva a buscar las argumentación que la legitime. El sujeto opera de este modo sin saber cuáles son los hilos que lo mueven en este proceso. Se tiende a dar con ello una "explicación lógica" a los sentimientos, pensamientos o conductas que de otro modo provocarían ansiedad o sentimientos de inferioridad o de culpa.

Cuando la alienación es promovida por la fuerza social dominante, suele el poder alienante llevar a cabo su acción mediante una teoría, que puede ser religiosa, política, ideológica, científica o de cualquier otra índole, y cuyo autor generalmente está ya fallecido. El individuo alienado puede pertenecer tanto una ideología minoritaria como ser parte de la ideología mayoritaria. Alienarlo busca tan solo que acepte las condiciones. Esta alienación social intencionada puede ser un conjunto de acciones represivas, coercitivas, maltrato, exclusión social o persecución persistente, realizada por un individuo o más comúnmente un grupo específico, sobre otro grupo o sobre un individuo. Puede consistir tambien en una forma de propaganda intencional y sistemática de persuasión con fines ideológicos para su explotación como recurso humano. Esta alienación intenta evitar que el individuo sea dueño de su vida y promueve la esclavitud: esclavo manumiso, zombi.

En las sociedades más alienantes cualquier vecino puede ser el delator. Cada individuo posee el poder de denunciar al otro, y por ello poder para condenar a cualquiera que piense diferente. La relación perseguido-perseguidor es circular: el perseguido puede convertirse en cualquier momento en perseguidor para reforzar el control social. Esta noción ayuda a reforzar la idea del grupo como unidad e incluso a fomentar la consolidación de un status quo, que fortalece a la autoridad. Posteriormente, y para justificar la segregación del individuo no deseado de posiciones de poder, incluido el económico, que podría adquirirse, se emplean conceptos psicológicos de discriminación definiendo a las personas o las acciones como inadecuadas o inferiores para impedir que los individuos libremente puedan aspirar a cambiar su situación, limitando así sus derechos y su intento de cambiar una situación que les perjudica y de la cual podrían prescindir si lo intentasen.

Según el filósofo e historiador Michel Foucault que realiza su tesis sobre Hegel, en el siglo XIX surge el concepto de enfermedad mental , Foucault hijo de un médico, teoriza sobre el sentido histórico de la alienación mental.

Foucault denuncia la confiscación de su voluntad y de su pensamiento. Escribe sobre la locura, la prisión, el encierro, el hospital, la sexualidad. El alienado mental es aquel que ha perdido el uso de las libertades que le ha conferido la revolución burguesa. Es por eso que su voluntad puede ser sustituida por la voluntad abusiva de un tercero, es decir que su voluntad es anulada. Otro puede ejercer sus derechos y gozar de sus bienes en su lugar. Faucault realiza una crítica de todas las lógicas obsesivas.

Para Foucault esta alienación psicológica no es más que la consecuencia de las contradicciones sociales mismas en las que el hombre está históricamente alienado. Estas mismas contradicciones de la sociedad burguesa constituyen la alienación social.

Concepto filosófico de la alienación

El concepto de alienación social ha estado presente en muchos debates filosóficos. Se dice que alguien está alienado cuando intenta jugar un papel que no le corresponde según el puesto que ocupa en la sociedad. Sería el caso de una persona de clase baja, por ejemplo un obrero, que tiene intereses, maneras o actitudes propias de los miembros de las clases acomodadas.

Otros ejemplos son, cuando el obrero percibe su salario como rendimiento de su empleo, y ese salario le ofrece únicamente la posibilidad de atender a su supervivencia actual, sin ofrecerle una seguridad futura y sin reflexionar que está siendo explotado desde ese mismo momento. Cuando el empleado, lejos de realizarse a sí mismo como persona, se convierte en un mero producto mercantil, es decir, no se le respeta como a una persona y son un simple elemento sustituible de la máquina productiva. Cuando el operario o autor del trabajo pierde el control de las mercancías que produce fruto de su trabajo, pasando éstas a ser controladas por el capitalista que las utilizará en propio provecho. Cuando los empleados asalariados se separan del colectivo del que forman parte, diferenciándose y enfrentándose a otros trabajadores con el objetivo de obtener ciertos beneficios que les ofrece el empleador: mayor salario, mejor consideración, ascensos, etc pero que significa un empobrecimiento real de las condiciones del grupo y la disolución como grupo solidario lo que conlleva la pérdida implicita de su independencia y una situación personal por la cual el individuo está bajo el dominio de otro, perdiendo la capacidad de disponer libremente de su propia persona y de sus bienes, es decir cae en una situación de esclavitud. Se le niega su condición de persona pasando a ser ganado.

Las técnicas psicológicas de manipulación de los recursos humanos que producen como resultado la alienación laboral, buscan tan solo la desmoralización del grupo y el fomento de la desconfianza dentro del grupo asalariado para suprimir la conflictividad social, eliminar el derecho a la huelga, las reivindicaciones economicas, condiciones laborales como calefacción o tiempo para comer y cualquier otra que encarezca la mano de obra en el competitivo mundo laboral.

Para el cristianismo de la Edad Media, la alienación era la posesión del cuerpo del hombre por el demonio. Después del Renacimiento la alienación representa la esclavitud. El individuo es desposeido de todo, incluso de su voluntad, como un zombi, deja de ser dueño de su vida y es reducido a la esclavitud, para su aprovechamiento por su dueño.

Con la revolución burguesa se define al ser humano por su derecho a ser dueño de su libertad y ser tratado con igualdad. El hombre ya no es siervo, vasallo o esclavo, sino un ciudadano libre con plenos derechos. Al alienado se le identifica con el esclavizado.

Karl Marx, en su Teoría marxista de la alienación y sus Manuscritos económicos y filosóficos de 1844 popularizó el concepto filosofico, pero otros pensadores se centraron en el fenómeno, entre otros Charles Fourier, Ludwig Feuerbach, Hegel, Max Stirner, Karl Friedrich Göschel, Giovanni Gentile, Johann Philipp Gabler, Karl Ludwig Michelet, Bruno Bauer, Martin Heidegger, Friedrich Wilhelm Joseph von Schelling, Blaise Pascal, Kierkegaard, Jean-Jacques Rousseau, Julian Rotter, Wilhelm von Humboldt, Jean-Paul Sartre, Albert Camus y David Friedrich Strauss.

Para Johann Gottlieb Fichte los conceptos de extrañamiento y alienación son sinónimos.

Hegel formula algunas breves indicaciones en relación al sentido psiquiátrico del término pero también toma en cuenta la función del Estado con respecto a la alienación, ya que el Estado es el mediador entre la alienante sociedad civil y el espíritu absoluto. Hegel medita de una forma idealista sobre el fenomeno de la alteración y deformación de la vida en la conciencia de los individuos. Para Hegel el fenómeno de la enajenación refleja la única forma en que le es dado al espíritu universal, cumplir su fin en la historia. En ese despliegue histórico el espíritu se vale de la conciencia social e individual, abriéndose camino a través de la inmensa masa de voluntades, de intereses y actividades individuales Para su fin. La enajenación es el mecanismo mediante el cual el espíritu universal cambia y transita por múltiples configuraciones históricas hacia su fin: el autoconocimiento. Para Hegel extrañamiento no es exactamente lo mismo que alienación. Para Hegel la alienación es el momento del desgarrarse, en cambio, extrañamiento se refiere al momento de comenzar a adelantarse en sí mismo. Hegel expone los momentos constitutivos del trabajo alienado en su tratado sobre «Filosofía del derecho». El estado efectúa una mediación que podría permitirle devolverle el concepto al espíritu extrañado por la alienación de la sociedad civil. Su idea de alienación remite al marco religioso y metafísico. Los procesos históricos se pueden explicar como una sucesión de procesos de alienación, en cambio la naturaleza no se puede explicar como un proceso de alienaciones progresivas sino como lo explica la ciencia, sin alienaciones.

Hegel tuvo una gran influencia en la teoría de la alienación de Karl Marx, ya que Marx rechaza la teoría de Hegel en todos sus aspectos, excepto en el método empleado para desarrollarla. Marx se apoya en una antropología del hombre total y tiene una gran presencia en la filosofía contemporánea, especialmente en la oposición entre Ser y Tener.

Para Marx el capitalista compra con dinero el trabajo de los demás y los obreros cambian la fuerza de trabajo, es decir, su mercancía, por la mercancía del capitalista, es decir, la paga o salario. La fuerza de trabajo para el obrero es su actividad vital que le asegura los medios necesarios para subsistir. El obrero es libre de cambiar de capitalista, es libre de trabajar, pero no puede desprenderse de la clase de los capitalistas, a quienes se ha alquilado, sin renunciar a su existencia misma.

El trabajador no recoge el valor de lo que produce, es decir, la plusvalía, y esta explotación lo priva de sus herramientas artesanales. Por causa de esta división del trabajo ignora lo que está produciendo y eso significa que está alienado. Este desconocimiento es la alienación para Marx.

Marx estudia la alienación del producto del trabajo considerando que cuanto más se sumerge el obrero en su trabajo más extraño se le vuelve el mundo y menos dueño es de sí mismo. El trabajador siente que su trabajo no le pertenece. Esta es la alienación económica que genera alienación política y es la causa de la alienación religiosa.

Para Herbert Marcuse la intensificación del progreso parece estar ligada con la intensificación de la falta de libertad. La dominación del hombre por el hómbre está aumentando en dimensión y eficacia, cuando los logros materiales e intelectuales de la humanidad parecen permitir la creación de un mundo verdaderamente libre. Marx tuvo una gran influencia en la teoría de la alienación de Marcuse. Para Marcuse el progreso de la técnica en el trabajo somete más todavia. Gracias a las nuevas técnicas, la sociedad tiende cada vez más a la uniformidad de criterios y a pensamiento únicos totalitarios. Marcuse cree que es posible que la represión y la alienación se perpetuen indefinidamente sino surje un contra-movimiento internacional que haga cambiar esta sociedad, ya que el disfrute de la vida se opone a la forma en que se realiza actualmente el trabajo. El patrono se sirve de la represión y la alienación para conseguir la plena dedicación del empleado.

Paul Lafargue, yerno de Marx, cree que la alienación es el resultado de la corrupción moral del proletariado inducida por el capitalismo. Hay que odiar al trabajo en la civilización capitalista, porque la consecuencia del trabajo es la miseria individual y social de los ultimos dos siglos. Cree que el trabajo en la sociedad capitalista lleva hasta el agotamiento de las fuerzas vitales del individuo y de su progenie. Según Lafargue en vez de reaccionar contra esa aberración mental, los curas, los economistas, y los moralistas, han sacrosantificado el trabajo, han pretendido rehabilitar lo que su dios ha maldecido. El trabajo es la causa de toda degeneración intelectual y de toda degeneración organica. Si la clase obrera se alzara en su fuerza terrible para reclamar, no ya los derechos del hombre, que son simplemente los derechos de la explotación capitalista, ni para reclamar el "derecho al trabajo", que no es más que el derecho a la miseria, sino trabajar solo 3 horas al día, el mundo sería un lugar nuevo. Pero cree que es imposible que un proletariado corrompido por la moral capitalista reaccione. Se suicida con su mujer para evitar tener que conocer la decadencia de la vejez.

André Gorz desea reducir al mínimo el trabajo, separar el trabajo de la vida, para evitar la alienación gracias a la producción de sistemas economicos alternativos al capitalismo. No se puede glorificar el trabajo como la fuente esencial de la identidad y el pleno desarrollo personal, porque los trabajadores no pueden desarrollar plenamente su humanidad en el trabajo tecnificado.

Michel Onfray, habla del uso alienante de la técnica: A menudo la técnica se utiliza disociada de las finalidades eudemonistas (que tienden al bienestar de la mayoría). Se producen menos bienes de consumo para satisfacer a la población, que objetos de moda perecederos, fabricados con el fin de conseguir del consumidor que compre. En condiciones de paro y precariedad de empleo, (necesarios para los patrones que sostienen esas calamidades con el fin de mantener bajos sus costes de producción y optimizar su competitividad), con la disminución del trabajo (tambien sostenida, sin preocupación real y seria por compartirlo, a fin de asegurar un clima de sumisión de los empleados para con su empleador), a la alienación (aumento de los ritmos y cadencias, cálculo exigénte y cronometrado de la productividad). Solo un combate para invertir el movimiento y poner la tecnología al servicio de los hombres puede hacer esperar un mundo en el que la brutalidad, la violencia y la ley de la jungla retocedan, por poco que sea.

El conocimiento de la alienación está muy presente en la cultura popular y ha sido tratado por muchos autores en todos los campos culturales. El escritor estadounidense Jack London, se sirvió del fenomeno de la alienación para desarrollar varias novelas, entre ellas: "The Minions of Midas" (Las Muertes Concentricas), "The Wanderer of the Stars" (El vagabundo de las estrellas), "The Iron Heel" (El talón de hierro).

George Orwell fue el ensayista en lengua inglesa que creó el concepto de «Gran Hermano» que desde entonces pasó al lenguaje común de la crítica de las técnicas modernas de vigilancia. En la novela 1984 escrita por George Orwell se describe una sociedad donde los ciudadanos viven sometidos a un control asfixiante y a una propaganda alienante que los desmoraliza y les impide pensar críticamente.

Tiempos modernos es un largometraje de 1936 dirigido, escrito y protagonizado Charles Chaplin. La película constituye un retrato de las condiciones desesperadas de un empleado de clase obrera en la época de la Gran depresión, condiciones promovidas por la eficiencia de la industrialización y la producción en cadena.

El autor Quino presenta el tema en muchas de sus historietas, Mafalda es una historieta que se inscribe dentro de la critica social. Es un grupo social imaginario que ostenta los tipos humanos que se podían encontrar en un barrio en sus coordenadas históricas.

El padre de Mafalda es un oficinista infantilizado de clase media, que sostiene la ideología de la opinión media argentina. Una especie de sentido común, de pequeñas ambiciones, de mirada corta y acomodaticia. La madre una ama de casa, con todo el folclor de su condición, objeto del escarnio de su avispada hija con respecto a sus miopes metas. Mientras, la televisión trata como idiotas a los espectadores. El país atravesaba por esa época un fuerte cuestionamiento social, tanto de los sindicatos y obreros, como de los intelectuales y estudiantes. La inestabilidad política impulsaba un constante fracaso de la democracia y una alternancia caótica entre gobiernos democráticos débiles y regímenes militares autoritarios carentes de consenso social y político.

La obra de Quino, como la de otros autores contemporaneos, tiene como uno de sus objetivos enfocar la alienación de forma actual e histórica, incluyendo una crítica a la alienacion causada por los medios de comunicacion masivos actuales.

Alienación en el psicoanalisis

Para el psicoanálisis, la alienación es una patología de la idealización y de la identificación.

Véase también

• Teoría marxista de la alienación
• Control mental
• Consumismo
• Guerra de cuarta generación
• Lavado de cerebro
• Propaganda
• Hegemonía cultural
• Reificación

Enlaces externos

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